El trabajador de la guardería tenía una botella de vino de 'agua' en el patio de recreo

Una madre 'horrorizada' de dos hijos se ha quejado al Ministerio de Educación después de que se descubrió que un trabajador de la primera infancia que cuidaba bebés tenía vino disfrazado en una botella de bebida en el área de juegos, y todavía está trabajando en el centro.

Un ex trabajador de la guardería le dijo a Stuff que el trabajador solía beber "líquido coloreado" de una botella, y decía que era jugo de manzana, y que una taza de café en la sala de profesores olía a alcohol.

La madre de Tauranga, Renee Hodgins, sacó a sus dos hijos de la guardería Kids on Nineteen Daycare el 23 de diciembre, cuando se enteró del incidente que había ocurrido seis semanas antes.

“Un niño podría haberlo bebido. Estaba horrorizado y enojado porque esta persona había estado cuidando a mi hija y a otros bebés. Esperamos que sea un lugar donde los niños estén protegidos. volver a trabajar allí, mientras los padres están a oscuras", dijo Hodgins a Stuff.

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Las instalaciones del centro son propiedad de la misma familia Tauranga que era propietaria del centro de cuidado infantil Abbey's Place, al que asistió Malachi Subecz con heridas graves antes de su asesinato. Ese centro fue clausurado por el Ministerio de Educación el año pasado. Kids on Nineteenth Ltd es una empresa dirigida por directores independientes, el empresario de Auckland Udit Singh y Rob Deacon, con sede en Wellington.

El Ministerio había identificado previamente, en una revisión del centro en 2020, "el incumplimiento de las normas reglamentarias que suponen un riesgo inaceptable para los niños".

Después de su queja, a Hodgins se le dijo en mayo que la licencia del centro había sido degradada a "provisional". Hodgins luego presentó una segunda queja al Ministerio de que la mujer todavía estaba trabajando en el centro.

Un documento interno fechado el 10 de noviembre visto por Stuff describe el incidente.

Se refiere a una reunión el 9 de noviembre entre la directora del centro, Marlene Best, y la trabajadora, que no era una maestra registrada, sino una cuidadora empleada por el centro. Ella no figura en el sitio web del centro, que enumera a otros miembros del personal del centro. Stuff ha optado por no nombrar a la persona.

El documento detalla cómo una botella encontrada en el patio de recreo parecía ser vino.

"Ayer también recuperé su botella del armario antes de hablar con usted y descubrí que tenía un contenido similar", escribió Best.

"Usted informó que efectivamente había alcohol en su botella de agua y que estaba lidiando con problemas personales".

"Usted es consciente de que este es un asunto serio y que constituye una mala conducta grave según su contrato de trabajo. Sus acciones bajo la influencia del alcohol pueden comprometer la seguridad de nuestro personal docente y tamariki".

Cuando Stuff se le acercó, el director del centro, Singh, dijo que el trabajador fue despedido de inmediato.

"Tomamos medidas inmediatas una vez que el problema salió a la luz y retiramos al miembro del personal en cuestión en espera de una investigación completa. Nuestra investigación tuvo en cuenta las pautas de seguridad y del Ministerio", dijo.

"No hubo compromiso con los estándares de seguridad de los niños".

El maestro ahora trabajaba en el centro "como un empleado ocasional", fue monitoreado y se sometió a "rehabilitación", le dijo a Stuff.

El trabajador involucrado se negó a comentar cuando Stuff se le acercó.

Los padres no fueron informados sobre el incidente, pero después de las consultas de Stuff esta semana, los propietarios del centro enviaron a los padres una carta informándoles que era probable la cobertura de los medios. La carta no mencionaba el alcohol.

Sin embargo, Hodgins alega que el trabajador no fue despedido de inmediato y continuó trabajando allí hasta diciembre, cuando Hodgins dijo que tenía la intención de presentar una queja ante el Ministerio de Educación.

"La vi allí con mis propios ojos a principios de diciembre cambiando el pañal de mi hija. De manera preocupante, estaba en una salida al parque supervisando a niños menores de dos años". dijo Hodgins.

Otro ex trabajador también le dijo a Stuff que la persona continuó trabajando hasta finales de diciembre.

"Saber que estaba bajo la influencia te hace sentir extremadamente temeroso. Me preocupaba que dejara caer a uno de los bebés". el ex empleado le dijo a Stuff.

Jocelyn Mikaere, subsecretaria del Ministerio de Educación, dijo que se informó al Ministerio sobre el incidente el 17 de enero.

El Ministerio visitó las instalaciones y examinó los registros para determinar si el centro cumplía con los requisitos reglamentarios, dijo.

"Establecimos que el servicio no había cumplido con los criterios de licencia y las Regulaciones de Educación (Servicios para la Primera Infancia) de 2008. El servicio se colocó en una licencia provisional y debe rectificar las áreas de incumplimiento dentro de un plazo específico".

Cuando se le preguntó por qué no se informó a los padres y por qué el trabajador parecía estar todavía en el centro, el Ministerio dijo que no era el empleador, pero que cualquier persona que trabajara con niños debería ser revisada por motivos de seguridad.

"Determinamos que no hubo daño a los niños durante este incidente y, por lo tanto, es un problema de empleo que es manejado por el centro".

Los registros muestran que la licencia del centro fue degradada previamente por el Ministerio en 2020, por no cumplir con los requisitos reglamentarios mínimos.